Refugio de colibríes

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Quienes guían este maravilloso recinto nos dan una lección práctica sobre botánica, para entender cómo la vegetación y los animales ensayan su encuentro, y para ello tenemos que aprender no solo a observar sino a respirar con el entorno. Paciencia y alegría atraen a los colibríes y también a la suerte. 

Visita muy recomendable para que grandes y chicos practiquen la paciencia y contemplación, formas por excelencia para sintonizar el ritmo de la naturaleza.

En este jardín de extrema belleza, un aprendizaje se halla. Pues mientras más tranquilidad y paz uno lleva, más colibríes su vista encuentra. Un destino ideal para fotógrafos, amantes de los jardines y sobre todo para entendidos en el arte de la contemplación. Pues quien en verdad orquesta el veloz aleteo de estas diminutas aves –simpáticas y llamativas como ellas solas– no es otro que el lento e imperceptible movimiento de las plantas. Y no es magia ni casualidad sino buen cultivo, atento cuidado y natural crecimiento que tras ocho años de vegetal espera recién sus frutos entrega. Así, al más ágil entre los voladores atrae –dueño del aleteo más rápido de todos–. No hay colibrí, entre las diecinueve especies que visitan estos jardines, que no se resista ante estas flores y su líquido néctar. De nuevo, no es casualidad, pues todo buen contemplador sabe apreciar la lenta y verde belleza de un hermoso jardín con flores, igual que lo hacen estos ágiles voladores.



¿DÓNDE?

Indicaciones: 5,2km desde Samaipata por carretera 7 rumbo a la ciudad de Santa Cruz

Contacto: +591 73167735

www.tucanderatours.com/sitios/colibries

fb @el refugio de colibries